“Guía Completa para Visitar Machu Picchu: Consejos, Rutas y Recomendaciones”

  • Inicio
  • “Guía Completa para Visitar Machu Picchu: Consejos, Rutas y Recomendaciones”
Ubicación del Parque Nacional del Manu

Ubicación del Parque Nacional del Manu

El parque Nación del Manu se ubica en los departamentos de Cusco y Madre de Dios, al sur este del Perú, en la parte oriental de la cordillera de los Andes y el borde occidental de la cuenca amazónica. Fue establecido el 29 de mayo de 1973, sobre una superficie de 1’532,806.00 ha, de acuerdo con su norma de creación. Posteriormente, en el año 2001 es categorizada definitivamente, ampliando su extensión a 1’716,295.22 ha.

El Manu se desarrolla sobre una formidable red de cuencas hidrográficas que le dan sustento a su geomorfología, permitiéndole su condición privilegiada para definirse como un parque megadiverso en términos ecológicos. Las cuencas principales son: el Alto Madre de Dios y Manu, en el primero destaca las estribaciones andinas abruptas, de naturaleza torrentosa y con numerosos afluentes, como el río Q’ero, Pilcomayo, Tono y Piñipiñi principalmente. La cuenca del río Manu con 19 afluentes, destacando el Pinquen, Panahua, Pucacungayoc, Cumerjali, Sotileja, Fierro, Pacarrubia, Contejo, Cashpajali y Manu chico, cuya dinámica y recorrido forman meandros y cuerpos de agua denominados “Cochas”, destacando entre las más importantes: Cocha Romero, Brashco, Juarez, Otorongo, Salvador, entre otros. 


Características del Parque Nacional del Manu

Características del Parque Nacional del Manu

El Parque Nacional del Manu es una de las pocas áreas protegidas del mundo que contienen gran diversidad de ecosistemas, desde pastizales de altura a más de 4000 m.s.n.m. hasta los bosques tropicales lluviosos, pasando por los bosques nublados. Conformado por un sistema hidrográfico sumamente complejo.

Es el área natural protegido con mayor diversidad biológica del Perú, por contener casi todos los ecosistemas, contiene el 10 % de las especies de aves del mundo y el 5 % de mamíferos. También contiene al menos 50 especies animales globalmente amenazadas, 997 especies de aves registradas, lo que le confiere el estatus de área importante de aves. Ocupa el tercer lugar en extensión en el Perú después del Parque Nacional Alto Purús y Reserva Nacional Pacaya Samiria. En 1977 fue declarado por el programa El Hombre y la Biosfera de la UNESCO como Reserva de la Biosfera del Manu, con una extensión de 1’881,200 ha. En 1987 la UNESCO lo incorporó en la lista del Patrimonio Natural de la Humanidad, por su enorme valor para la conservación de la diversidad biológica y sus múltiples atractivos naturales.

En el interior del parque habitan poblaciones indígenas en situación de aislamiento, además de una notable diversidad de etnias amazónicas.


Flora y fauna

En general el Parque Nacional del Manu alberga un número significativo de paisajes y ecosistemas naturales donde se desarrollan un sin número de especies animales y formaciones vegetales constituidas por árboles que superan los 45 metros de altura, destacando varias especies de interés comercial como el “cedro”, “caoba”, el “ishpingo”; también palmeras como el “aguaje”, “shapaja”, “ungurahui”, “pona”, entre otros. Igualmente, el bosque pluvial andino con árboles de tamaño mediano, destacando las palmeras y helechos arbóreos, así como una enorme cantidad de plantas epifitas. El resto del territorio lo constituyen el bosque de montaña, con una variedad de plantas desde grandes árboles, arbustos, bejucos y hierbas, siendo las más dominantes las epifitas como las orquídeas, bromelias y piperáceas principalmente, y el bosque de colinas bajas, con una vegetación de “paca” o “bambúes”, de árboles de tamaño mediano y una gran variedad de arbustos. La flora en general cuenta con un record de más de 4000 especies, y más de 350 especies de orquídeas destacando los géneros Catasetum, Oncidium, Odontoglossum, Maxillaria, Epidendrum, Telipogon, entre otros.

 

Los exponentes de la fauna, están representado por los grupos de mamíferos, aves, reptiles, peces, anfibios e insectos. Se estima que la reserva albergaría un total de 31 familias de mamíferos incluidos en 132 géneros y 159 especies, destacando el “otorongo” Panthera onca, el “yaguarundi” Felis yagouaroundi, la “sachavaca” Tapirus terrestris, la “huangana” Tayassu pecari, el “sajino” Tayassu tajacu, el “venado” Mazama americana, el “lobo de río” Pteronura brasiliensis y el “ronsoco” Hydrochoerus hydrochaeris, considerado el roedor más grande del mundo. Las aves en el parque son aún más abundantes, se estima que existirían más de mil especies distribuidas en 423 géneros y 67 familias. Entre los reptiles se conocen 50 especies de serpientes, 40 de saurios, 06 tortugas y 03 caimanes. Los peces suman unas 210 especies, entre los que destacan las “pirañas”, “boquichicos”, “sábalos”, “doncellas”, “anguilas”, “rayas”, “zúngaros”, “bagres”, “pacos” y “dorados”. El número de insectos es asombroso, solo el grupo de las mariposas incluyen más de 1300 especies, 300 hormigas y 650 de escarabajos.


Belleza Paisajística

El Parque Nacional del Manu es poseedora de paisajes deslumbrantes, gracias a la variedad de ecosistemas y el contexto privilegiado donde se encuentra, lo que hace de este parque uno de los bosque más bellos del mundo. Lugares como Tres Cruces, donde el paisaje se convierte en un espejismo de colores mágicos, es uno de los pocos lugares en el mundo donde se puede observar la salida del sol desde el mirador natural de Tres Cruces, a más de 3600 m.s.n.m.

Dese Acjanaco es posible observar el bosque nublado del valle de Kosñipata, en una vista privilegiada de la compleja configuración geográfica, que va cambiando paulatinamente a medida que las grandes montañas van cubriéndose de bosques transicionales hasta llegar al llano amazónico.

En la llanura amazónica el paisaje es exuberante de vegetación, con infinidad de especies de flora y fauna. La geografía esta dominada por un entramado de ríos que sustentan una compleja red de ecosistemas. A su vez, los ríos van dejando cochas en su paso efímero por el cambio del curso principal, lugares donde prolifera notablemente la vida silvestre. Hábitat de especies en peligro de extinción como: los lobos de río (Pteronura brasiliensis) y el lagarto negro (Melanosuchu niger).


Diversidad Cultural

El Parque Nacional del Manu esta habitado por poblaciones indígenas desde hace cientos de años, los cuales viven en forma tradicional, desarrollándose en comunidades nativas: Tayacome, Yomibato, Tsirerishi y Sarigeminike. En la zona de Amortiguamiento se tiene las comunidades de Santa Rosa de Huacari, Callanga; y los asentamientos de Mameria y Piñipiñi, así como grupos en aislamiento voluntario (Mashco piro, Amahuaca) y grupos en contacto inicial (Yora, Nanti, Kugapakori).


Arqueología

En cuanto a la arqueología, el Parque Nacional del Manu cuenta con vestigios de época pre inka e inka. Sitios como los petroglifos de Pusharo, descubierto por el sacerdote dominico Vicente de Cenitagoya a orillas del río Palotoa;  y los petroglifos de  hinkiori en la comunidad nativa de Quero Wachiperi, son muestra de la ocupación de épocas remotas.

La época inka dejo evidencia de su paso por las zonas alto andinas hasta llegar a la Amazonía, caminos inkas como los hallados en las zonas de Mameria, Callanga y Yavero, muestran el avance que tuvieran los inkas en estas zonas amazónicas.


Pueblos originarios del Parque Nacional del Manu

Los pueblos originarios que viven en el Parque Nacional del Manu son: Yine, Matsigenka, Yora y Wachiperi; en contacto inicial se tiene grupos como: Mashco piro, Yora y los Nanti (posiblemente un subgrupo Matsigenka); y los grupos en asilamiento voluntarios de los que poco se sabe.

Cabe resaltar que algunos grupos al interior del Parque no siempre vivieron en esta área geográfica, posiblemente sean grupos que a través de migraciones por diversos factores han ido ocupando espacios en diferentes zonas del Parque.


Matsiguenka

Matsiguenka

El pueblo Matsiguenka pertenece a al familia lingüística Arawak, su denominación deviene de su idioma originario que puede traducirse como “seres humanos” o “gente”.

los Matsiguenka  habitan los bosques tropicales en el sur del Perú, al este de los Andes, en los departamentos del Cusco y Madre de Dios. Gran parte de la población Matsiguenka habita en la región del Urubamba, aproximadamente el 80 u 85 %; entre tanto el 15 o 20 % se encuentra en la región de Madre de Dios, incluyendo el Alto Madre de Dios, el río Manu y sus tributarios. Es el grupo étnico más numeroso del Parque Nacional del Manu, se ubican principalmente en los tributarios al norte del río Alto Madre de Dios, el Alto Manu y sus tributarios.

El Matsiguenka es considerada una lengua vital por el Ministerio de Educación, aprobándose en el año 2009 su alfabeto oficial.


Modo de vida

Modo de vida

Los Matsiguenka tradicionalmente han vivido en asentamientos pequeños en chozas diseminadas, organizadas en torno a la familia. En el pasado era común la poligamia, algunas familia estaban conformadas por un jefe de familia y dos o más mujeres que conservaban sus propios espacios dentro del mismo hogar. En la actualidad es raro encontrar estas practicas de organización familiar.

Practican la caza, pesca, recolección y agricultura de subsistencia, teniendo como productos más importantes: la yuca, maíz, plátano entre otros cultivos.

La medicina tradicional cumple una función muy importante en la vida de los Matsiguenka. Lo cual es desarrollado especialmente por los chamanes, quienes a través de brebajes y remedios caseros a base de plantas con propiedades curativas, son capaces de curar diversas enfermedades y dolencias.


Turismo en el Parque Nacional del MANU

El turismo es una actividad desarrollada especialmente en la Zona de Amortiguamiento y Transición, con especial demanda en Tres Cruces, desde donde se puede observar el son a su salida de oriente, sobre una sabana de nubes que sube desde la Amazonía.

Los bosques de ceja de selva y los bosques nublados, son aprovechados para la observación de la vida silvestre, aves en especial.

Mientras que en la cuenca media del río Manu se encuentran las cochas, lagunas meándricas, atractivos turísticos con mayor demanda en todo el parque. Entre las más importantes tenemos: Cocha Juárez, Salvador y Otorongo. En 1998 se construye el albergue “Casa Matsiguenka”, para generar ingresos a favor de as comunidades nativas Tayakome y Yomibato, el cual cuanta con hermosas instalaciones de infraestructura de estilo rústico, con cómodos ambientes rodeados de naturaleza y accesible a una gran diversidad de atractivos turísticos como: la cochas, qollpas, senderos de observación de vida silvestre entre otros.

 

Entender la conservación en pleno siglo XXI conlleva a entender que vivimos en un momento crítico, donde percibir su propósito es una cuestión de sobrevivencia para la especie humana. Estas generaciones tienen la enorme responsabilidad de un cambio sustancial en su mondo de vida, así como el replantearse las estrategias para hacerle frente al embate del cambio climático, y sus consecuencias, es el momento decisivo para frenar la emisión de los gases invernaderos, la tala indiscriminada de los bosques, la acumulación de basura en los océanos,  entre tantas practicas de una sociedad  que condena al planeta a un genocidio ambiental. Una clave quizá sea el mirar a los grupos étnicos en la Amazonía y su forma de vida coherente con en el medio ambiente, todo en la naturaleza es percibida como seres importantes colmados de vida, son percibidos como parte de ellos mismos, siendo incapaces de causarle daño. 


Texto y fotografía: Reenzo Velásquez Bernal